Actor de cine y teatro, Arturo es el preferido de los nuevos directores argentinos. Es el protagonista de las primeras películas de Pablo Fendrik El asaltante (2007) y La sangre brota (2008) y el excéntrico aristócrata de Rompecabezas (2009) opera prima de Natalia Smirnoff. Sus interpretaciones han despertado los elogios de la crítica especializada internacional.